Por Lenin Contreras
El 20 de junio la Corte Internacional de Justicia (CIJ) declaró que los asentamientos que mantiene Israel en las regiones de Jerusalén del Este y Cisjordania son ilegales. En lo que va del 2024, es la segunda resolución de un organismo internacional contra Tel-Aviv. El 20 de mayo, la Corte Penal Internacional (CPI), sentenció la inmediata detención del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu por los crímenes de guerra cometidos por las fuerzas de ocupación israelí en Gaza desde octubre de 2023.
La realidad es que dichas resoluciones o sentencias presionan poco a Netanyahu, Israel y sus aliados. Están convencidos de concretar su plan de ocupación plena del territorio palestino mientras no exista rompimiento de relaciones diplomáticas de forma generalizada por parte de la comunidad internacional, bloqueos comerciales o financieros, embargo de armas y fundamentalmente una suspensión o retiro del apoyo del complejo industrial-militar estadounidense y el gobierno en Washington.
El mundo observa como Israel goza, para usar las certeras palabras de Nada Awad [1], de un excepcionalismo en cuanto al respeto del derecho internacional, ya que históricamente no atiende las resoluciones de organismos internacionales pese a perpetrar en Gaza un genocidio por medio de una limpieza étnica y una segregación racial en Cisjordania y Jerusalén del Este.
Después de que se declarara de forma ilegitima e ilegal la creación de un estado judío en territorio palestino mediante la resolución 181 de la ONU, el cual le concedió injustificadamente el 54 % del territorio, Tel Aviv literalmente no atiende las resoluciones de la ONU. La lista de violaciones israelíes a las resoluciones de organismos internacionales es larga.
- Resolución 194 de la Asamblea General de la ONU. 11 de diciembre de 1948. Establece en su artículo 11 que los palestinos expulsados de su territorio tienen el derecho al retorno y ser indemnizados por la potencia ocupante.
- Resolución 242 del Consejo de Seguridad de la ONU. 22 de noviembre de 1967. Se establece que es inadmisible que Israel conquiste o expanda territorio por medio de la guerra y se ordena la retirada del ejército israelí de todos los territorios ocupados tras la guerra de los seis días.
- Resolución 3236 de la Asamblea General de la ONU. 20 de noviembre de 1974. Establece el reconocimiento de que el pueblo palestino tiene derecho a la libre determinación de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas. Reafirma los derechos inalienables del pueblo palestino a la libre determinación sin injerencia del exterior y el derecho a la independencia y la soberanía nacional.
- Resolución 446 del Consejo de Seguridad de la ONU. 22 de marzo de 1979. Es ilegal la ocupación de territorios palestinos y la construcción de asentamientos judíos en dichos territorios. Además, se reconoce a Israel como una potencia ocupante que tiene la obligación de cumplir con los Convenios de Ginebra.
- Resolución 478 del Consejo de Seguridad de la ONU. Agosto de 1980. Niega que Jerusalén se la capital Israel.
- Resolución 799 del Consejo de Seguridad de la ONU. 18 de diciembre de 1992. Condena la expulsión forzada de población palestina de los territorios ocupados tras la guerra de 1967 y 1973.
- Resolución 1515 del Consejo de Seguridad de la ONU. 19 de noviembre 2003. Ratifica todas las resoluciones anteriores, incluyendo el derecho del pueblo palestino a contar con su Estado.
- Resolución 2324 del Consejo de Seguridad de la ONU. 23 de diciembre de 2016. Reconoce que los asentamientos israelíes en territorio ocupado de Jerusalén Oriental y los que se han instalado desde 1967 son ilegales.
- Resolución 1397 del Consejo de Seguridad de la ONU. Reconoce las fronteras del Estado Palestino y por tanto la soberanía de su pueblo y el derecho de contar con su Estado.
Después de 74 años Palestina sigue sin contar con su Estado, las fronteras se estrechan cada día más, se siguen profanando los lugares sagrados de los palestinos, no se ha garantizado el retorno de los palestinos expulsados, los territorios ocupados después de las guerras de 1967 y 1973 siguen bajo control israelí, los asentamientos judíos en territorio palestino de Cisjordania o Jerusalén del Este se expanden y el sionismo mantiene su intención de nombrar a Jerusalén como su capital. Todo lo anterior supone, como bien lo dice el esclarecedor análisis de Awad, “la quiebra del Derecho Internacional en Palestina”
¿Cómo puede Tel Aviv reiteradamente violar el derecho internacional? Porque tiene el poder militar y financiero para hacerlo, poder que subyace en el imperialismo estadounidense. Mientras el apoyo financiero y militar de EE. UU y algunos estados europeos siga fluyendo, Israel desatenderá las últimas resoluciones del CIJ y la CPI, al igual que ha hecho con los señalamientos de la ONU o el Consejo de Seguridad en los últimas siete décadas.
La ayuda millonaria de los EE. UU sigue llegando a raudales a las fuerzas de ocupación sionistas, que tan solo en el año de 2023 ascendió a 26 mil 400 millones. Entre 1999 y 2008 la ayuda militar promedio de Washington a Tel Aviv, fue de 26 mil millones de dólares; entre 2008 y 2018, de 30 mil millones de dólares, y; de 2019 a 2028 se tiene programado que sea de 38 mil millones de dólares [2].
Aunque la comunidad internacional reconoce que Israel es una potencia ocupante y a palestina como territorio ocupado, lo que supone que el pueblo palestino no tiene derechos civiles, no existen medidas eficaces para acabar con la sistemática violación del derecho internacional y de los derechos humanos.
La forma excepcional en que Israel violenta el derecho internacional ha puesto en jaque todo el andamiaje jurídico sobre el que se intenta construir la relativa “paz” en medio oriente, y si se desata un conflicto bélico de dimensiones regionales más amplio, no será responsabilidad ni de Hamas, ni de los Hutíes en Yemen, sino del sionismo-imperialismo y de los tambores de guerra que toca todas las mañanas el complejo industrial estadounidense y sus operadores en Washington y Europa.
Hoy la humanidad tiene una deuda con la lucha por la liberación del pueblo palestino, lo que hagamos o dejemos de hacer para detener el genocidio será también parte de la historia.
Notas:
[1] Nada Awad, Derecho Internacional y excepcionalismo israelí: la quiebra del Derecho Internacional en Palestina, consultado en https://rebelion.org/derecho-internacional-y-excepcionalismo-israeli-la-quiebra-del-derecho-internacional-en-palestina/
[2] Consultado en https://latamnews.lat/20231012/asi-es-como-eeuu-ha-destinado-una-autentica-fortuna-en-armar-a-israel-durante-decadas-1144649667.html y en https://piedepagina.mx/estados-unidos-ha-proporcionado-a-israel-130-mil-millones-de-dolares-en-ayuda-y-armas/